Las facturas de electricidad británicas son ahora las más altas de Europa y el Reino Unido ciertamente ha demostrado su dependencia del gas y las energías renovables para la generación de electricidad. El miércoles, los precios de la electricidad en Gran Bretaña subieron casi un 19% a £475 después de haber alcanzado máximos históricos recientes. Durante este período, las principales subastas de electricidad del Reino Unido alcanzaron un récord de 2500 libras esterlinas por megavatio (normalmente solo 40 libras esterlinas por megavatio) debido a un incendio en una estación convertidora que importa electricidad de Francia. El inversor energético danés Nordstrom Invest se declaró en quiebra la semana pasada, mientras que dos proveedores de energía en el Reino Unido cerraron sus puertas definitivamente. Esta crisis energética ha llegado en un momento en que los gobiernos europeos y el Reino Unido se están recuperando de la pandemia de COVID-19. Esta semana, la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, anunció que Europa se estaba recuperando de la pandemia a un ritmo más rápido de lo esperado.
¿Cómo pasó esto?
Bueno, en primer lugar, el clima inusualmente frío durante abril aceleró los precios del gas en Europa y provocó que el almacenamiento de gas en Europa cayera por debajo del promedio de 5 años antes de la pandemia. Es preocupante que la región no haya logrado hasta ahora que esos suministros de gas vuelvan a los niveles necesarios para el período invernal. Otro peligro es la dura competencia de los proveedores de gas en América del Sur y Asia que también están provocando que suba el precio. Algunos analistas han argumentado que la desaceleración del suministro de gas natural por parte de Rusia es un intento de fortalecer su caso para el Nord Stream 2. Se espera que el gasoducto que generó mucha controversia esté en pleno funcionamiento este año. Ole Hansen, jefe de estrategia de productos básicos de Saxo Bank, dice que Europa está luchando porque la región no produce su propio gas en grandes volúmenes y, en cambio, debe depender de las importaciones. Con Europa acercándose a las energías renovables como la eólica y la solar, las condiciones del verano no ayudaron. La generación hidroeléctrica en el sur de Europa se vio afectada por corrientes de aire y el Reino Unido sufrió una grave falta de viento.
Advertencia de invierno
Según un equipo de analistas de Goldman Sachs, la región deberá competir con Asia por el suministro de gas licuado si el invierno es más frío de lo esperado. Goldman Sachs recomendó que los consumidores europeos cubran su exposición al gas ante esta incertidumbre. El aumento de los precios del gas ha provocado un debate sobre los compromisos medioambientales del Reino Unido, ya que la nación se vio obligada a reabrir una antigua central eléctrica de carbón para satisfacer las necesidades de electricidad a principios de septiembre.